“Si yo quiero comprar una propiedad de dos millones de euros, igual a la que le incautaron a Mikel Moreno en la Toscana, tendría que trabajar 120 años”, dice un joven periodista del diario italiano La Repubblica, quien está siguiendo de cerca el caso de la villa expropiada al ex Presidente del Tribunal Supremo de Justicia, hoy valorada en 6 millones de euros. “Solo los super ricos pueden vivir así”, remata.
La propiedad y los tres autos, ubicados en Vía San Gennaro 79, Capannori, está ahora en las manos de la “Agenzia del Demanio” (Agencia de Bienes del Estado), que depende del Ministerio de Economía y Finanzas de Italia, por lo que el futuro de la millonaria Villa es bastante incierto a corto plazo ya que, aseguran los locales, la clásica burocracia italiana la mantendrá cerrada quién sabe por cuánto tiempo antes de ponerla a la venta o subastarla. De hecho, en el portal del organismo se lee que “la institución tiene encomendada la custodia del patrimonio inmobiliario del Estado, con la responsabilidad de administrar una cartera de aproximadamente 43.000 activos por valor de 62.000 millones de euros”. De modo que la lista de espera para vender o subastar la Villa del venezolano y todo lo que incluye, se tardará.
Una búsqueda en el portal de la agencia estatal italiana sobre el actual destino de la propiedad incautada a Mikel Moreno y a su esposa Debora Menicucci no arrojó ningún resultado, porque si bien allí aparecen centenares de bienes similares, incautados y sometidos a la venta o a subasta pública, cabe suponer que la evaluación no solo de la Villa sino todo lo que ella incluye -muebles, obras de arte, ropa, joyas, etc.-, deberá tomar un buen tiempo. Sobre todo si, como publicó El Nuevo Herald en enero de este año, en los nuevos cargos que presentó la Fiscalía del Sur de La Florida contra Mikel Moreno y su esposa, se pudo demostrar que han derrochado millares de dólares en ropa de marca y relojes de lujo solo durante unas vacaciones en Miami. “Las autoridades detectaron compras por 600.000 dólares pagadas con tarjetas de crédito para adquirir artículos de Prada, Ferragamo y otros productos de diseño en tiendas de Bal Harbour. Adicionalmente, Moreno gastó 50.000 dólares en un taller de reparaciones de relojes de lujo en Aventura, y realizó un pago de 40.000 dólares a un director de un concurso de belleza venezolano”. Entonces cabe la sospecha de que el matrimonio debe haber gastado otra fortuna en adquirir artículos de lujo en Italia, la cuna del buen gusto, no solo para amoblar su Villa sino para llenar los closets de las marcas de lujo que tanto les gusta lucir.
“La propiedad y los tres autos, ubicados en Vía San Gennaro 79, Capannori, está ahora en las manos de la ‘Agenzia del Demanio’ (Agencia de Bienes del Estado), que depende del Ministerio de Economía y Finanzas de Italia”
Y si bien seguimos a la espera de las fotos del interior de la “Villa Moreno Menicucci”, una búsqueda de casas similares y por la misma zona -realizada entre las agencias inmobiliarias más prestigiosas de Italia-, producen una mezcla de asombro y rabia frente a lo que suponemos otra burla de los poderosos a un país como la Venezuela actual. Por ejemplo, una villa similar, que oferta la inmobiliaria Lionard Luxury Real Estate en la misma zona, cuenta con 1.400 metros cuadrados de construcción y contiene “9 dormitorios y 11 baños distribuidos en cinco plantas en total y ha sido renovada recientemente para devolverle su esplendor original… El sótano se ha convertido en un centro de bienestar con zona de spa y sauna, y se caracteriza por hermosos techos abovedados de ladrillo”. Y, como en la villa de Moreno y Menicucci, “tiene un anexo de 355 m2, 2 dormitorios y 2 baños, un salón común, un garaje y la antigua capilla se ha convertido en un área para eventos en la planta baja”.
Por lo pronto, en Google Maps se pueden seguir las coordenadas de la propiedad, solo que estas conducen a la antigua entrada enrejada -las imágenes son de 2019-, que cerraba el paso a los desconocidos. Pero fotos más recientes, como la publicada por el diario italiano La Repubblica, muestran la entrada más cuidada, con la grama bien cortada y muchos más árboles sembrados alrededor de la pequeña vía que conduce a las puertas de la villa.
Pero si se busca la dirección en OpenStreetMap, se verán imágenes más recientes tomadas vía satélite y donde no solo se puede apreciar cuán grande es el terreno y la casa, sino que la propiedad incluye otras dos casas independientes y pequeñas -¿para la servidumbre, los padres?-, que pudieron haber completado el retiro dorado al que aspiraba Mikel Moreno en esa bellísima zona de Italia, a solo 20 minutos de restaurantes con estrellas Michelin, visitas a los viñedos en las colinas de Lucca o un paseo por el casco de la ciudad, famosa por sus manantiales o el acueducto de Lorenzo Nottolini.
Y aunque al exmagistrado le sobran propiedades donde retirarse (posee una villa en La Romana, la zona más lujosa de República Dominicana que adquirió por 1,5 millones de dólares, más un apartamento en Miami por el que también pagó otros 1,5 millones de dólares), a raíz de la incautación en Italia, el mundo se le está poniendo pequeño y quizás su ansiado retiro en Europa se reduzca al edificio que compró completo en la Urbanización Las Mercedes, todo un búnker para alguien con tanto dinero.