En la aldea
12 mayo 2024

Gustavo Perdomo cabalga, se arropa con banderas y esconde las sanciones

El presidente ejecutivo de Globovisión encabezó la movilización convocada por la Federación Venezolana de Coleo, de la cual es miembro, en apoyo al referendo por el territorio Esequibo. Una forma patriótica de echar al olvido sus supuestos vínculos con la célebre banda de “Los Enanos” y las acusaciones de la justicia estadounidense. Y a propósito, ¿de dónde sacaron los caballos que usaron en la cabalgata?

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Omar Luis Colmenares | 23 noviembre 2023

La imagen del jinete Gustavo Perdomo al frente de la cabalgata que el pasado sábado 18 de noviembre se movilizó en defensa del territorio Esequibo, pudo trasladar a cualquier compatriota desprevenido a los tiempos del “Vuelvan caras”, esa expresión victoriosa recogida -con retoques, se supone- por la historiografía oficial que tanto sentimiento patrio aún inspira en las inocencias escolares.

A lomos de un bonito caballo castaño, con sombrero llanero de pajilla y luciendo una especie de liquiliqui azulado, el doctor Perdomo, un “coleador de mucha fama”, según lo presentó el anunciador, tomó la palabra para destacar el orgullo que siente al asumir la defensa de la patria. Estaba frente al Consejo Nacional Electoral (CNE), a donde llegó, proveniente del Parque Los Caobos, la cabalgata que organizó la Federación Venezolana de Coleo (Feveco) en apoyo al referendo consultivo sobre el Esequibo.

“En 2020, Gustavo Perdomo asumió la presidencia del diario El Universal, otro de los medios tradicionales que pasó a tener ‘una línea neutral’”

En lugar de una lanza, el doctor Gustavo Perdomo, “de la Federación”, empuñó un micrófono y habló en nombre de los “coleadores” que lo acompañaron, la mayoría luciendo franelas con el mapa de Venezuela y el territorio en reclamación debidamente incorporado. No faltaba más. “Es la primera oportunidad -aseguró, histórico- que tenemos los venezolanos, después de la guerra del Libertador, de expresarnos a través del voto -importante aclaratoria- para defender la patria… Invito para que el 3 de diciembre votemos cinco veces sí por la patria”.

A estas alturas de la movilización, ya quedaba claro que hasta el más distraído que estuviese presenciando la escena estaba consciente de que la gesta no se desarrollaba en el Llano, sino en Caracas; que el héroe no era Páez, sino -una vez más- Bolívar; y que el momento representado no era el de la Batalla de Las Queseras del Medio, sino el de la lucha que se está librando por el Esequibo, ese territorio demostradamente venezolano -con documentos históricos y jurídicos- que sigue reclamando todo el país.

Una iniciativa con aires folklóricos llamativa y oportuna, indudablemente. Y legítima. Aunque resulta inevitable advertir que los nobles equinos que se utilizaron no han debido pasarla del todo bien por las calles caraqueñas, y, algo más significativo, que el rol protagónico que asumió Gustavo Perdomo en la defensa de los intereses nacionales no se corresponde en lo absoluto con los papeles de reparto que desde hace tiempo ha desempeñado en las más diversas aventuras, reñidas en su mayoría con el interés de la patria, valga acotar.

Al trote con “Los Enanos”

Gustavo Perdomo es abogado penalista. Al igual que su socio y cuñado, Raúl Gorrín. En el Poder Judicial se desempeñó hasta el año 2000. Su nombre comenzó a sonar en ambientes de los tribunales y en los medios a partir del florecimiento de la banda de “Los Enanos”, a la cual se le relacionó.

La banda de “Los Enanos” fue constituida -no legalmente, por supuesto- por un grupo de abogados que se apoyó en sus vínculos con magistrados del Tribunal Supremo de Justicia. El trabajo que realizaba consistía, básicamente, en el ocultamiento de expedientes y antecedentes penales a cambio de gigantescas comisiones. “Eran vendedores de sentencias”, según definió a sus integrantes Luis Velásquez Alvaray, exmagistrado que conoció el monstruo por dentro.

La banda de “Los Enanos” es considerada la organización de corrupción judicial más grande de la historia contemporánea de Venezuela. En su momento, en 2006, después de caer en desgracia y ser destituido, Velásquez Alvaray describió su funcionamiento y su origen. En una declaración que se puede ver en este link de Youtube, donde relata que la existencia de la banda fue conocida públicamente a raíz del asesinato del fiscal Danilo Anderson, quien formó parte de ella pero había comenzado actuar por su cuenta.

La banda estaba compuesta por miles de funcionarios de todos los organismos del Estado y de la oposición. Surgida de un grupo de jueces y fiscales, tomó fuerza con la extorsión a los firmantes de la Lista Carmona, a los que se apresuraron a suscribir la salida de Hugo Chávez. Alvaray menciona a José Vicente Rangel como guía intelectual, y a Raúl Gorrín y a Maikel Moreno como operadores. Gustavo Perdomo se asomaba como prospecto.

“Los Enanos” -siempre según el relato de Alvaray- se instalaron en el Poder Judicial como una banda vendedora de sentencias. Controlaban todos los tribunales del país en las distintas áreas: laboral, civil, penal. Posteriormente, extendió ramificaciones hacia el narcotráfico, el contrabando y el crimen organizado. Pero su actividad primaria fue la extorsión de camioneros.

Cuenta Alvaray que tenían comandos de extorsión que actuaban en las carreteras. Matraqueaban a los gandoleros. Los obligaban a pagar en los peajes. Al país se lo dividieron por regiones. “Gorrín se encargaba de Caracas y Perdomo de Oriente”, reveló Alvaray. Después extendieron redes que llegaron hasta PDVSA y el Arco Minero. Contaban con magistrados y con una presidenta del TSJ (Luisa Estela Morales) y una Fiscal General (Luisa Ortega Díaz) que sabían mirar hacia otro lado.

La sociedad entre Gorrín y Perdomo se solidificó en poco tiempo. Para 2008 se les había unido Domingo Febres Cordero. El 19 de diciembre de ese año, los tres adquirieron Seguros La Vitalicia. Gustavo, además, estaba activo en la práctica de deportes ecuestres. El Sistema Bolivariano de Comunicación e Información (Sibci) publicó que en 2008 compitió como jinete, de acuerdo con un registro de la Asociación de Eventos Western de Venezuela.

Lujo revolucionario

Ya entonces, también, exploraban oportunidades allende los mares, aunque no tan lejanos. De los negocios de esos socios en Estados Unidos poco se sabía. Pero como el lujo es algo que cuesta disimular, las debilidades de Perdomo y su compadre comenzaron a ser conocidas y de ahí a ser reseñadas por la prensa no transcurrió mucho tiempo. La vida de lujos en Miami del jinete venezolano fue motivo de reportajes en el diario estadounidense El Nuevo Herald y en portales como El Comercio. Y son reveladores de esa curiosa atracción que sienten por este lugar tan inhóspito para los revolucionarios personajes que en público -en este caso a través de sus propios medios- se rasgan las vestiduras en defensa del pueblo y sus valores nacionales.

El punto es que los medios citados se hicieron eco, entre otras cosas, de la compra de una vivienda por 3,5 millones de dólares a través de la firma Magus Holding LLC, en la que Perdomo aparecía como director. Una curiosidad es que la empresa había sido registrada pocos días antes de que se formalizara la compra. La propiedad, adquirida en octubre de 2011, está ubicada en Cocoplum y tiene un área de 576 metros. Para 2014, se calculó su valor en 4,48 millones de dólares.

Las reseñas del momento destacaron que tanto Gorrín como Perdomo compraron otras propiedades que superaron los 4,4 millones de dólares en zonas exclusivas, con acceso a la bahía y con muelles particulares en los que podían amarrar sus yates. En ninguna de las propiedades, dice el reportaje de El Comercio, figuran los nombres de los empresarios como los dueños. Sin embargo, están registradas como activos de las compañías donde ellos o sus familiares figuran como ejecutivos o directores.

“La banda de ‘Los Enanos’ es considerada la organización de corrupción judicial más grande de la historia contemporánea de Venezuela”

Párrafo aparte merece la categoría vehículos. Si bien es cierto que a Perdomo le gusta andar a caballo, también lo es que no se podía contener a la hora de soltar las riendas de las camionetas Mercedes y AudiQ7, y de los autos Ferrari y Maserati por las autopistas de la Florida.

“Viven en Miami, son dueños de mansiones de varios millones en Cocoplum, manejan por las calles sus autos lujosos y se ríen de usted”, denunció el senador Marco Rubio durante una de las audiencias realizadas para sancionar a figuras vinculadas al gobierno venezolano, según lo cita El Comercio. En esa oportunidad recalcó que la vida de lujos de estos personajes era notable en el Sur de la Florida.

Crecen “Los Enanos”

Hasta ese momento, en Venezuela, tanto Perdomo como Gorrín habían optado por mantener un perfil más bien discreto. Pero, en 2013, la estrategia cambió. El presidente Chávez acababa de fallecer y los dueños de Globovisión habían considerado que el mantenimiento del canal era inviable en los planos económico, político y jurídico. El 14 de mayo se concretó la venta. Desde ese momento, Raúl Gorrín, Juan Domingo Cordero y Gustavo Perdomo se convirtieron en los nuevos propietarios.

La operación fue calculada por expertos en 80 millones de dólares. “La compra se hizo con dólares preferenciales obtenidos a través de Tesorería Nacional”, precisó el político y editor del portal Cuentas Claras, Carlos Tablante. Fue así como un abogado etiquetado como miembro de la conocida banda de “Los Enanos” que operaba en los tribunales, y hombre de confianza de la pareja Maduro-Flores, se convirtió en el dueño del medio de comunicación sostén de la información y de la opinión de la sociedad venezolana.

En lo que hoy se puede considerar como una broma pesada, la nueva directiva anunció que la línea editorial del canal se centraría en la imparcialidad. “Será una voz neutral”, aseguraron. No pasó mucho tiempo para ver desfilar por la puerta de salida a periodistas y anclas que se habían consolidado como referencias en la planta de noticias.

Sancionado y prófugo de la justicia

En enero de 2019, la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) sancionó a Raúl Antonio Gorrín Belisario y a Gustavo Perdomo Rosales por malversación de fondos, lavado de dinero y soborno a la Oficina Venezolana del Tesoro Nacional. Desde entonces, son prófugos de la justicia estadounidense. En una sola operación, según el Departamento del Tesoro de Estados Unidos, el grupo delincuencial que participó en la empresa criminal acusada había logrado obtener más de 2.400 millones de dólares.

En la acusación se especificó que la Oficina Venezolana del Tesoro Nacional era sobornada para realizar operaciones ilícitas de cambio de divisas en Venezuela. Aprovechaban la diferencia en el cambio de dólares para obtener desproporcionadas ganancias. Usaban empresas fantasmas.

En la mencionada designación -de conformidad con la Orden Ejecutiva 13850- además de Raúl Antonio Gorrín Belisario y su socio y cuñado Gustavo Adolfo Perdomo Rosales, fueron incluidos la extesorera de Venezuela, Claudia Patricia Díaz Guillén y su marido y exedecán de Hugo Chávez, Adrián José Velásquez Figueroa; Leonardo González Dellán; María Alexandra Perdomo Rosales (esposa de Gorrín) y Mayela Antonina Tarascio-Pérez (esposa de Perdomo).

“Tras el pago de costosas firmas de cabildeo, el 19 de marzo de 2019 la OFAC removió a María Alejandra Perdomo Rosales y a Mayela Antonina Tarascio-Pérez de la lista e incluyó a Adrián Antonio Perdomo Mata”, destaca la nota de Reporte.

Según la sanción de la OFAC -indica la reseña-, Gorrín y Perdomo compraron activos y pagaron gastos para Alejandro “El Tuerto” Andrade, extesorero general de Venezuela, relacionados con numerosos aviones, yates y propiedades en Estados Unidos y en el extranjero, múltiples caballos de campeonato y numerosos relojes de alta gama. La compra de todos estos bienes y la transferencia de pagos se ocultaban detrás de una red sofisticada de compañías estadounidenses y extranjeras que encubrían la propiedad real de los individuos.

Andrade, quien se declaró culpable en 2018 por participar en una red de lavado, fue condenado a 10 años. Los acuerdos de colaboración con las autoridades estadounidenses le permitieron lograr una reducción del 65% de la condena, y hoy reside en Estados Unidos con libertad plena.

Empresas sancionadas

La sanción del Departamento del Tesoro significó el bloqueo de más de una veintena de empresas controladas por los miembros de la estructura, entre las que figuran Globovisión Tele C.A., propiedad de Gorrín y Perdomo; Globovision Tele CA, Corp., registrada en Miami, Florida, también propiedad de ambos; Seguros La Vitalicia; Corpomedios GV Inversiones, C.A., ubicado en Caracas, y Magus Holding LLC, registrada en Miami, Florida, controlada por Gustavo Perdomo, por citar unas pocas.

Como resultado de esta acción, el gobierno estadounidense también bloqueó todos los bienes e intereses en la propiedad de aquellos designados, hoy sujetos o en tránsito, por la jurisdicción de Estados Unidos, y generalmente se prohíbe a las personas dentro del territorio de la nación realizar transacciones con ellos.

Raúl Gorrín y Gustavo Perdomo cerraron en Estados Unidos las empresas Globovisión Tele C.A. o Globovisión Tele CA, Corp. el 27 de septiembre de 2019, según reflejan los récords públicos de empresas del estado de la Florida.

Sin embargo, la incursión mediática no se detuvo. En 2020, Gustavo Perdomo asumió la presidencia del diario El Universal, otro de los medios tradicionales que pasó a tener “una línea neutral”.

El doctor Gustavo Perdomo, como es visible, anda a pleno galope. El sábado 18 de noviembre dio una demostración de su dominio del deporte ecuestre. También es evidente el reconocimiento que tiene de sus compañeros de la Federación Venezolana de Coleo, una tradición folklórica arraigada, nacida del ejercicio de la faena de demarcación del ganado en la vida cotidiana que hoy ostenta la categoría de deporte ecuestre.

Aunque bueno sería que explicaran de dónde salieron los caballos. Tal vez el Instituto Nacional de Hipódromos, a través de su presidente, Antonio “El Potro” Álvarez, tenga algo que decir, ya que también participó en la movilización. Otra cosa es desear que quienes izan las banderas patrióticas lo hagan con todas sus acciones.

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