Chipi Chacón vive desde hace casi tres años en Bogotá. Es parte de la diáspora, sí, pero hay momentos en los que ha sentido que los periodistas buscan un morbo en su historia que no existe. Él es ese prodigio que naturalmente tenía que buscar crecer en un lugar importante tanto de la música académica como de la industria musical y lo halló, por ahora, en la capital colombiana junto a su esposa y su hija Samantha.
Lo saben todos quienes lo siguen, Chacón es hijo de una familia musical: El contrabajista Gerardo Chacón es su padre; y Eric, flautista emigrante entre Miami y las giras de Rawayana, su hermano. Resultó nominado a los Latin Grammy 2019 y, hace casi dos meses, estaba empacando la ropa que cuidadosamente seleccionó para cada una de las galas de los premios donde, sorprendido, se dio cuenta de que la Academia Latina de la Grabación le tenía preparados reconocimientos especiales, eventos y un lugar en todas las alfombras rojas de esa semana por ser nominado junto a otros rostros conocidos.
-¿Cómo llega un músico con formación académica a estar nominado junto a artistas urbanos firmados por majors en la misma categoría?
-Le debo todo a mi formación académica. Fue mi base para poder migrar sin problema al jazz, al pop y a la música latinoamericana en general. La categoría Best New Artist siempre se ha caracterizado por tomar en cuenta lo mejor que está pasando musicalmente en los países de habla hispana, no importa cuál sea el género musical. Por esta nominación han pasado los artistas más importantes que tiene la industria musical desde hace 20 años y me siento honrado que la Academia me haya tomado en cuenta. Creo que mi performance cantando mis canciones e improvisando con mi trompeta fue lo que captó la atención del jurado.
-¿Qué fue lo que más te sorprendió en Las Vegas?
-Sin duda poder vivir esta gran experiencia de estar nominado en los Latin Grammy como artista revelación. El trato de la Academia fue excepcional, fueron sumamente respetuosos y sabían mucho sobre mi carrera, eso me dejó muy sorprendió y halagado.
-¿Surgió algún proyecto nuevo a partir de ese viaje?
-En este momento estoy grabando dos discos nuevos: “Past and present” y la continuación de mi disco “Transparente”. Contaré con unos súper invitados de lujo que logré concretar durante la semana de los Latin Grammy.
-A pesar de que has tocado en innumerables escenarios en el mundo, este es tu primer gran paso dentro de la industria de la música. ¿Qué más quieres hacer dentro del terreno comercial?
-No quiero perder mi enfoque, estoy logrando algo muy difícil que es convertir mi música en algo comercial sin perder mi esencia. Ese es el camino que quiero seguir: Hacer lo que siento, ser natural y llegar cada vez más a los corazones de las personas.
-¿Crees que vivir en Colombia influyó de alguna manera en tu nominación a los Latin Grammy?
-Creo que Colombia es una gran plaza, sin duda, pero lo más importante que ha pasado es que desde que me fui de Venezuela valoran mucho más mi talento en mi país.
-¿Crees que Venezuela es un nombre que suena cada vez más dentro de estos premios?
-Venezuela tiene un talento único y siempre estará en la palestra. Pero eso no es de ahora, viene desde hace muchísimo tiempo.
-¿Cuál es el siguiente paso después de una nominación al Latin Grammy?
-Seguir creando, seguir creyendo, seguir soñando, seguir creciendo como artista pero, sobre todo, como ser humano.
-¿Cuál es el aprendizaje más grande que te trajiste de vuelta a casa? -Que los sueños sí se hacen realidad cuando tienes disciplina, cuando te preparas y haces las cosas con amor y entrega. Que no necesitas millones de dólares, o una disquera para poder llegar; pero sí necesitas ser creativo y genuino; y que, si realmente eres bueno, tu talento se hará sentir tarde o temprano. Puede que tarde un poco, pero llegará el momento. Sólo hay que mirar la historia detrás de los artistas que más admiramos porque esa puede ser nuestra mayor fuente de inspiración.
@MarcyAlejandraR